¿Qué es el Trastorno Desafiante Oposicionista?
El Trastorno Desafiante Oposicionista (TDO) es un trastorno de la conducta de origen infancia que se caracteriza por la presencia de un comportamiento negativo, desafiador e irritable en los niños. Los niños con TDO se resisten a las demandas y a los límites establecidos por los padres y los maestros, se oponen abiertamente a ellos, se enfadan con facilidad y se enojan con los adultos responsables. El TDO es una afección común entre los niños, afectando al 3-7% de la población infantil.
¿Por qué los niños desarrollan TDO?
Aunque la causa exacta del TDO no se conoce con certeza, se cree que es una combinación de factores biológicos y ambientales. Se cree que hay ciertos factores genéticos que contribuyen al desarrollo de TDO. Por otro lado, los factores ambientales, como el estrés, la falta de atención de los padres, el comportamiento negativo de los padres o el abuso emocional, también pueden contribuir al desarrollo de TDO.
¿Cuáles son los síntomas del TDO?
Los síntomas del TDO pueden variar de niño a niño, pero los principales síntomas son los siguientes:
- Resistencia a las demandas de los padres y los maestros
- Comportamiento negativo, desafiante e irritable
- Actitud desafiante hacia los adultos
- Problemas de control de impulsos
- Falta de responsabilidad
- Explosividad
- Baja tolerancia a la frustración
- Problemas con la autorregulación emocional
Además, los niños con TDO también pueden tener problemas de aprendizaje, problemas de atención, problemas sociales y problemas de conducta.
¿Cómo se diagnostica el TDO?
El TDO se diagnostica principalmente a partir de los criterios establecidos por el Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales (DSM-5). Para que un niño sea diagnosticado con TDO, deberá presentar cuatro o más de los siguientes síntomas durante al menos seis meses:
- Resistencia a las demandas de los padres y los maestros
- Comportamiento negativo, desafiante e irritable
- Actitud desafiante hacia los adultos
- Problemas de control de impulsos
- Falta de responsabilidad
- Explosividad
- Baja tolerancia a la frustración
- Problemas con la autorregulación emocional
También se tendrán en cuenta otros factores, como el nivel de desarrollo del niño, el estrés en el hogar o la presencia de otras afecciones.
¿Cómo se trata el TDO?
El principal objetivo del tratamiento del TDO es ayudar al niño a desarrollar habilidades para una mejor regulación emocional y un mejor control de sus impulsos. Para ello, se utilizan diferentes enfoques, como la terapia conductual, la terapia familiar, el entrenamiento en habilidades sociales y el entrenamiento en habilidades de autocontrol. También se recomienda que los padres reciban asesoramiento para aprender a lidiar con el comportamiento desafiante del niño.
¿Qué se puede hacer para prevenir el TDO?
Aunque no hay una forma de prevenir completamente el TDO, hay algunas cosas que los padres pueden hacer para reducir el riesgo de que sus hijos desarrollen el trastorno. Estas incluyen:
- Establecer límites claros y consistentes
- Ser un buen modelo de comportamiento para sus hijos
- Brindar una atención adecuada a sus hijos
- Promover el uso de habilidades de autorregulación y autocontrol
- Enseñar a los niños habilidades sociales y de resolución de problemas
- Ayudar a los niños a desarrollar habilidades de autoestima
- Ayudar a los niños a desarrollar herramientas para lidiar con el estrés
Además, los padres también deben estar atentos a los primeros signos de TDO y buscar ayuda profesional si tienen alguna preocupación.
Conclusión
El Trastorno Desafiante Oposicionista (TDO) es un trastorno de la conducta infantil que se caracteriza por la presencia de un comportamiento negativo, desafiante e irritable. Aunque la causa exacta del TDO no se conoce con certeza, se cree que es una combinación de factores biológicos y ambientales. Los síntomas principales del TDO incluyen resistencia a las demandas de los padres y los maestros, comportamiento negativo, desafiante e irritable, actitud desafiante hacia los adultos, problemas de control de impulsos, falta de responsabilidad, explosividad, baja tolerancia a la frustración y problemas con la autorregulación emocional. El TDO se diagnostica a partir de los criterios establecidos por el DSM-5. El tratamiento del TDO implica un enfoque multifacético que incluye terapia conductual, terapia familiar, entrenamiento en habilidades sociales y entrenamiento en habilidades de autocontrol. Además, los padres pueden hacer algunas cosas para reducir el riesgo de que sus hijos desarrollen el trastorno, como establecer límites claros y consistentes, ser un buen modelo de comportamiento, brindar una atención adecuada a sus hijos, promover el uso de habilidades de autorregulación y autocontrol, enseñar a los niños habilidades sociales y de resolución de problemas, ayudar a los niños a desarrollar habilidades de autoestima y ayudar a los niños a desarrollar herramientas para lidiar con el estrés.